La Puerta de Jerez

La puerta de Jerez toma su nombre de la primitiva puerta de la muralla que se encontraba, aproximadamente, en la esquina de la calle San Fernando. Ésta, a su vez, recibía tal nombre porque desde aquí salía el camino principal hacia Jerez de la Frontera.
De la puerta almohade hay pocos datos; algunos dibujos y grabados de los siglos XVIII y XIX, que muestran un pequeño arco encuadrado entre dos torres. Sobre él estaba la famosa lápida de 1578, que fue renovada por otra nueva en 1622. con este bello resumen histórico-poético de Sevilla:
HERCULES ME EDIFICO
JULIO CESAR ME CERCO
DE MUROS Y TORRES ALTAS
EL REY SANTO ME GANO
CON GARCI PEREZ DE VARGAS.
Inmediata a la puerta hubo un puente que cruzaba el arroyo Tagarete, que circulaba paralelo a la muralla, Esta primera puerta fue derribada en 1846, edificándose en su lugar una de carácter monumental y estilo neoclásico, formado por un amplio vano de medio punto flanqueado por dos pares de columnas toscanas. De esta puerta existen testimonios en grabados y fotografías.

Puerta sur de la ciudad, la de Jerez, era una de las más importantes de Sevilla. Estaba abierta las veinticuatro horas al día salvo contingencia. Fue la primera puerta de la muralla que se renovó, sustituyendo en ella el diseño primigenio de los almohades en Isbiliya por un arco flanqueado por dos torreones. La nueva puerta se terminó de construir el 24 de marzo de 1561 y a mediados del siglo XIX someten a la puerta a una remodelación, que cambia totalmente su fisonomía medieval, y es la que se puede observar en algunas fotografías de la época.. Su existencia fue de todos modos efímera, y no deja de ser paradójico qué se tomarían tantas molestias ya que fue derribada el 24 de septiembre de 1864 por propuesta que realizase el Sr. Pagés del Corro en cabildo de 21 de julio del mismo año.
La Puerta de Jerez Sevillana se cita en reiteradas ocasiones en las obras de Don Miguel de Cervantes y Saavedra tales como en Cipión y Berganza (el coloquio de los perros).